Actualmente me encuentro trabajando para la Fundación Comunitaria del Bajío (dona dinero pa que me puedan pagar plis, o no, como quieras... ojete), mi trabajo consiste en ir a las comunidades y hacer todo lo posible para que mejoren ¿mejorar en qué? en lo que se pueda, la fundación abarca salud, educación, desarrollo económico y rescate cultural; lo que garantiza que no podré cumplir todas mis metas, pero en fin... les dejo la experiencia que tuve en mi primer día de trabajo.
3 de Abril del 2014... Llegando a Mineral de Pozos
Negocio de Doña Martha |
Después de que la encontré en la pizzería de enfrente la acompañé caminando hasta su casa, cargado de mi mochila y maleta, apenas pesan 18 kilos en conjunto, pero se sentían como si fueran 40. Sin haber probado agua todavía logré cambiar la batería sin problemas (unas pocas chispas no son problemas en realidad), desafortunadamente la camioneta llevaba demasiado tiempo sin moverse y no arrancó, según Martha llevaba “meses parada”. Tras mi decepción fuimos de regreso hacia la plaza principal; Martha me invitó a pasar a la pizzería que se encuentra frente a su negocio, ahí le dejan usar el internet sin costo, así que aproveche el momento para comunicarme con el cuartel general de la fundación.
Pizzería |
Tenía una tarea urgente por cumplir, decidí llegar temprano a Pozos para alcanzar a hacer todo lo que necesitaba hacer, que es instalarme (aunque sea temporalmente), arrancar la camioneta e ir a San Nicolás del Carmen a hablar con Don Hilario el sub-delegado de la comunidad para recabar una información de su proyecto de ganado lechero; por desgracia no me salió nada bien, ya me había anticipado a la posibilidad de que la camioneta no funcionara, pero cuando pregunté a los locales cómo podía llegar a San Nicolás del Carmen nadie me supo decir, la mayoría ni siquiera sabía que existía.
Finalmente me habló Pablo Miller a las 4 de la tarde, al parecer había pensado que yo era un Rafa distinto con el que había quedado para montar unas lonas, cuando le aclaré que era el Rafa que llegaría a vivir con él por unos días se rió y prometió llegar en unos minutos. Efectivamente llegó al poco rato y me mostró la habitación y casa donde me quedaría… muy agradables en verdad.
Casa de Pablo |
Cuarto que me prestaron, se ve mejor sin mis cosas sobre la cama |
Después de trabajar en la computadora "digitalizando" las listas fui a visitar a “Don Jacinto”, que es el casero que renta la oficina de Pozos de la Fundación; resulta que se deben seis meses de renta, estuve hablando con él para calmarlo y platicarle cómo será el proceso para pagarle, después de platicar un rato nos dimos la mano y nos despedimos… nos va a subir 200 pesos la renta.
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